AEDEF y La Toná aconsejan una serie de factores clave que debe valorar marca y franquiciado
Según explica el director ejecutivo de la franquicia CerveceríaLa Toná, Roberto Fernández, “es muy complicado ganarnos al franquiciado con garantías de negocio porque lo único que le importa a este es el abaratamiento de los precios”.
El último escándalo en el mundo de las franquicias ha llegado de la mano de los supermercados DIA que, a nivel internacional, ha dejado a decenas de franquiciados quebrados; pero tampoco se deben olvidar otros casos que se han producido recientemente aquí en España como el de Funnydent. Éstos son solamente ejemplos de la imagen que está ofreciendo en la actualidad el ámbito de la franquicia y que hace que un sector que ha crecido un 27% desde el año 2008, se encuentre “tocado” debido a la pérdida de credibilidad que está viviendo. Y es que, según explica la gerente de la Asociación Española para el Desarrollo y Defensa del Franquiciado (AEDEF), Nerea Arriola, “se trata de un sector maduro e interesante parainvertir pero en este momento precisa de una mayor regulación que ofrezca confianza al emprendedor”.
La forma de lograr este cambio pasa porque las franquicias sean capaces de adaptarse a los nuevos hábitos del consumidor ytengan en cuenta las tendencias de los modelos de negociopero, sobre todo, “que sean completamente transparentes y no solamente tengan el objetivo de financiarse a través del franquiciado sino que cuenten con una estrategia mucho más ambiciosa que se base en preocuparse por éste y asegurarse de minimizar su riesgo”, asegura Arriola.
Por otra parte, el franquiciado también debe tener claro su propósito antes de lanzarse a montar una franquicia ya que según explican desde AEDEF, “existen muchos perfiles de franquiciados que son inexpertos, disponen de un dinero ahorrado y buscan el autoempleo,que deben tomarse su tiempo antes de decidir entre las diferentes opciones”. Por ello, desde AEDEF recomiendan al franquiciado realizar un estudio profundo de la franquicia para asegurarse de que es segura la inversión.
Sobre este tema también se alzan voces desde el ámbito del franquiciador. En concreto,Roberto Fernández,director ejecutivo de la franquicia Cervecería La Toná, reclama que no se pueden valorar todas las franquicias bajo el mismo rasero. “Nosotros creemos que las franquicias deben vivir del royalty, no de las aperturas y cánones pero la realidad es que utilizan estos ingresos para pagar su propia estructura y éste no es nuestro caso. Estamos haciendo grandes esfuerzos para demostrar nuestra transparencia pero vivimos en un momento en el que es muy complicado ganarnos al franquiciado”.
La rentabilidad a largo plazo es el objetivo que deben perseguir tanto franquiciados como franquicia y, en este sentido, tanto AEDEF como La Toná están de acuerdo al afirmar que “la única forma de mantener una franquicia en el tiempo es que franquiciador y franquicia trabajen como un verdadero equipo”.
Factores clave que debe valorar marca y franquiciado:
Según explican desde AEDEF existen tres puntos básicos para que el franquiciado se cerciore de que la franquicia es de confianza y, en contrapartida que su negocio tenga ciertas garantías de éxito: mantener un contacto directo con la marca, revisar los registros obligatorios y, sobre todo, hacer un análisis profundo de la cuenta de resultados y el número de locales propios que tiene la central de la franquicia.
Así, Cervecería La Toná se basa en esta estrategia y desde sus inicios, hace tres años, se ha enfocado en adaptarse a los nuevos tiempos y en ofrecer garantías al franquiciado. Su modelo se basa en los siguientes puntos:
1. Ofrecer márgenes estables a través de un control de materias primas adecuado.
2. Estudios personalizados de cada proyecto de expansión para minimizar los riesgos de la inversión a través de un equilibrio entre inversión y alquiler.
3. Invertir en formación continua y planes formativos en el personal.
4. Apoyo continuo al franquiciado en la gestión del negocio.
5. Flexibilizar los horarios de apertura y cierre del local, siempre y cuando no vayan en perjuicio de la marca y si es beneficioso para el franquiciado, atendiendo las particularidades de cada ubicación.
Por todo ello, desde La Toná advierten de que antes de invertir en una franquicia, el futuro franquiciado se asegure de que no les están “vendiendo humo” y que es una marca de confianza.