Sensebene alcanza los 7 centros en la Comunidad de Madrid tras su última apertura

Sensebene, cadena de centros especializados en estética corporal, acaba de inaugura un nuevo centro en Madrid, concretamente en la calle Ortega y Gasset, en pleno Barrio de Salamanca. Esta compañía ya cuenta con 6 establecimientos franquiciados más en la Comunidad de Madrid y dos en las Islas (Tenerife y Las Palmas). Para este año esta compañía, especializada en estética y belleza, ha desarrollado un plan estratégico encaminado a continuar creciendo a un ritmo similar para acabar 2010 con un mínimo de medio centenar de unidades operativas.

Este establecimiento franquiciado estará gestionado por la familia García-Galiano, acostumbrada a dirigir negocios ya que fue pionera en el transporte de pasajeros en autobús entre las capitales toledana y madrileña. “Aunque nos era familiar el termino emprendedor optamos por la franquicia, en lugar de abrir centros por cuenta propia, porque era más práctico, y no hubiésemos sabido seleccionar a las empleadas adecuadas, elegir el aparataje correcto, decidir qué precio asignar a cada servicio, desarrollar los protocolos de atención al público... mientras que la franquicia te lo dá todo hecho”, explica Margarita Clemente de Diego, portavoz de esta empresa familiar.

En cuanto a la elección de Sensebene como red en la que entrar a formar parte, esta familia de empresarios lo tenían claro; “La verdad es que nos hemos sentido atraídos desde el principio por la filosofía de esta marca, basada en la profesionalidad, la confianza, la calidad, una atención óptima al cliente y una innovación constante de aparatología y de nuevas técnicas. Puede sonar a prospecto publicitario, pero cuando lo vives desde dentro te das cuenta de que es cierto: esta nueva franquicia cimienta su estrategia de empresa sobre una apuesta firme por las personas, por el factor humano; lo que, junto con las últimas tecnologías estéticas, hacen posible ofrecer al público servicios de gran calidad y confianza”, confirma Margarita para finalizar con “además, la formación ha sido muy buena; 80 horas de curso inicial, que te permiten, además de dar los tratamientos, explicarle a fondo a las clientas en qué consiste cada uno, para qué es beneficioso, etcétera”.

El establecimiento de 60 metros cuadrados de se compone de cuatro cabinas (fotodepilación por luz fotopulsada, presoterapia–electroestimulación–infrarrojos y cavitación–electroporación–limpiezas faciales), además de una sala iluminada con luz natural para la máquina de vibrofitness (que contaría con espacio para un segundo aparato). De esta manera, ofrecen una amplia visión en tratamientos estéticos, y se mantienen a la vanguardia en la más alta tecnología, entregando a sus clientes una atención basada en el conocimiento pleno de todos los tratamientos que ofrecen.

Para establecerse como franquiciado de Sensebene se requiere una inversión inicial de 36.500 euros, con un royalty de explotación de 400 euros al mes y uno de publicidad de 100 euros. Si no se contara con toda la inversión, se ayudará al emprendedor en la gestión de las negociaciones con las entidades de crédito para adquisición de préstamos y fondos ICO. Los requisitos mínimos de local son 50 metros cuadrados de superficie, en poblaciones de 30.000 habitantes, a pie de calle o dentro de un gran centro comercial. Además, la central también realiza el “llave en mano” facilitando al inversor la entrada en el negocio sin necesidad de tener que involucrarse en la búsqueda, remodelación y adecuación del local.

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