La franquicia Pizzón Pizza continúa su expansión con paso firme cumpliendo el plan de aperturas facilitado a principios de año. En esta ocasión le tocó a Montilla, población situada a apenas 40 km de Córdoba, que acogió con los brazos abiertos el concepto con una multitudinaria asistencia.
La buena labor de esta y otras enseñas franquiciadoras parece demostrar la eficacia del trabajo bien hecho ante situaciones adversas, y cómo la crisis puede capearse adoptando medidas específicas. En estos momentos, afirma la enseña, el principal objetivo que se plantean es mantener las ventas de sus establecimientos, primando sobre la planificación de nuevas aperturas. Para ello dicen guiarse por dos máximas: mantener la calidad del producto intacta y buscar nuevas acciones promocionales que les permitan consolidarse como la primera opción del consumidor: “Somos conscientes de la situación y precisamente por eso dedicamos todos nuestros esfuerzos a adecuar la oferta a la demanda.” afirmaba Gregorio Serrano, Director de Franquicias.
Por último, afirmaba Serrano, Pizzón Pizza tiene ya elaborado un completo pack de acciones comerciales previstas para el primer semestre del año, que prevé permitirán a la cadena mantener los excelentes resultados cosechados hasta la fecha.