El grupo de franquicias Re-Imagina! Restauración participa en Expo Foodservice

28 mayo, 2008

Re-imagina! Restauración, grupo zaragozano creador de los negocios en franquicia La Mafia se Sienta a la Mesa (restaurantes ítalo-mediterráneos), La Croqueta (tapas de diseño), Mostaza (bocadillerías de gourmet) y La Barbacoa Classic (carnes a la brasa), ha participado en las VI Jornadas Internacionales de Restauración de Expo Foodservice celebradas en el Palacio de Congresos de Madrid durante los días 20 y 21 de mayo.

La Responsable de Marketing de la cadena de franquicias, Rebeca Chueca Serrano, ha impartido una ponencia en el I Encuentro de Directores de Marketing de Restaurantes celebrado en dicho evento que versaba sobre el Factor Emocional basado en el Marketing Experiencial y Sensorial.

Tal y como reflejaba la exposición de Chueca, el Marketing Experiencial se basa en “asociar ideas, momentos y sensaciones agradables al momento del consumo”. Re-imagina! Restauración “quiere convertirse en una empresa creadora de experiencias, siendo capaces de involucrar al cliente a nivel emotivo, físico, intelectual e incluso espiritual”. Para conseguirlo, Chueca argumenta que “las experiencias no suceden porque sí, tienen que ser planificadas”.

Continuando con esta premisa, la Responsable de Marketing del Grupo identifica cuatro pasos fundamentales para lograr el objetivo. En primer lugar, hay que realizar un estudio y análisis de las experiencias de los clientes desde que éstos entran en contacto con la empresa hasta que la abandonan. El segundo paso es definir la plataforma experiencial, es decir, establecer desde un punto de vista estratégico, cual es el tipo de experiencia que Re-Imagina! pretende suministrar a sus clientes. Seguidamente se debe realizar el diseño y planificación de las experiencias, ofreciendo soluciones a todas aquellas posibles percepciones negativas que pueden hacer que la experiencia no sea satisfactoria.

Por último, hay que realizar una estructuración del contacto o encuentro con los clientes teniendo en cuenta las percepciones sensoriales que se desean provocar y las emociones a generar en ellos. En este último paso queda patente que “es muy importante el cuidado de los pequeños detalles” “Cualquier interacción con el cliente debe estar planificada a pormenorizadamente. Todas las actuaciones y comportamientos del personal deben hacerlo sentir un “cliente único”, desde su recepción en el establecimiento, hasta el pago de la cuenta, pasando por el servicio en las mesas”, comenta chueca