Bajocero, franquicias de heladerías, inaugura su segundo establecimiento en Madrid

19 mayo, 2008

Bajocero acaba de inaugurar una nueva heladería - pastelería en pleno centro de la capital. Concretamente, el nuevo establecimiento se ubica en la Calle Conde de Peñalver, 32, y en él los clientes ya pueden disfrutar de la variada carta de helados y postres de calidad característica de la franquicia.

Con más de 170 m2 de superficie, una gran fachada exterior y terraza en la temporada estival, la heladería - pastelería de Conde de Peñalver es el segundo establecimiento propio con el que cuenta la enseña en Madrid. Este nuevo local, en cuanto a la decoración, es fiel a la estética vanguardista y acogedora de los locales Bajocero y respeta la línea y el mobiliario de diseño cuidado que en su día habían sido inaugurados por el primer local de la enseña (Glorieta de Quevedo, 6).

El nuevo establecimiento de Bajocero tiene capacidad para atender a más de un centenar de personas, las cuales, en un espacio amplio, podrán degustar los 24 sabores diferentes de helados naturales o darse un capricho con la nueva línea de bollería, bombones o pastas de té (todos ellos, productos de primera calidad y fabricados de forma artesanal). Cabe precisar en referencia al catálogo ofertado, que toda la línea de productos Bajocero se actualiza constantemente con nuevos sabores y colecciones para que de esta forma el cliente disfrute de la calidad y no renuncie a la variedad e innovación.

Con esta nueva apertura, Bajocero fortalece su presencia en Madrid a la vez que retoma su estrategia de expansión que culminará con el posicionamiento de la enseña en ciudades de más de 150.000 habitantes situadas en la costa cantábrica (San Sebastián o Santander), en la costa mediterránea (Barcelona, Valencia y Alicante), en Zaragoza y en los dos archipiélagos.

Bajocero nació en 2006 de la mano de, entre otros, un grupo inversor compuesto por la familia Schettini, el diseñador de moda Roberto Torretta y la modelo Nieves Álvarez. El objetivo de este proyecto ha sido crear una línea de heladería-pastelería de la más alta calidad y con una estética muy cuidada. Como el de Conde de Peñalver, los locales de Bajocero, de 120 a 300 m2, se sitúan en primeras líneas comerciales, avenidas o calles principales, áreas de oficinas, turísticas y de ocio, con tránsito elevado de personas. Lo ideal es que estén situados en esquina y que tengan posibilidad de terraza